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El suceso tuvo lugar durante la madrugada del pasado domingo, 24 de septiembre, a 48 kilómetros de la isla de Lanzarote.
El casco del barco atunero resultó gravemente dañado ante el ataque de un marlin, el cual produjo una entrada masiva de agua en el interior del pesquero.
La embarcación contaba con cinco tripulantes a bordo en aquel momento, los cuales se encontraban en grave peligro. La tripulación procedió a instalar dos bombas de achique en la sala de máquinas y pusieron rumbo a la costa de Lanzarote, como una medida desesperada para evitar un suceso fatal.
El personal de la ONG Emergencias de Lanzarote (Emerlan) se trasladó a la zona para socorrer a los tripulantes. Los rescatistas de Emerlan llevaban una motobomba de achique y notificaron al puerto base del pesquero, para que tuvieran constancia de lo sucedido y preparasen medidas ante la llegada del barco a tierra.
Tras evaluar la situación del barco, lo más prudente era no detener la maquinaria y continuar la travesía hasta el puerto de La Tiñosa, en Lanzarote.
Afortunadamente, el atunero logró llegar al puerto, donde se inició el proceso de vaciado de los tanques de carnada. Se extrajeron hasta 13 toneladas de agua. Tras esto se procedió a retirar el lastre y vaciar la bodega del barco, para poder cumplir con las condiciones de la entrada al varadero.
La maniobra de entrada al varadero de La Tiñosa y todo el proceso de varada, así como el resto de labores, se pudieron llevar a cabo gracias a la ayuda de Emerlan.
Los 5 tripulantes sobrevivieron y salieron ilesos del incidente.
